Te pongo una reflexión que me ha llevado años madurar. ¿Quieres un vintage? No esperes a encontrarlo. ¡Cómpralo nuevo!
¿Cómo se hace eso? Pues buscando en los catálogos de las marcas, modelos que son reedición u homenaje de modelos pasados, pero con la gran diferencia de que fueron fabricados con la técnica y la tecnología actual.
Por ejemplo, Hamilton te ofrece relojes Khaki de cuerda manual, en varios modelos. ¿Para qué buscar uno viejo por internet, que incluso te puede salir más caro, si puedes comprar el tuyo nuevo?
Certina acaba de sacar un modelo con cristal plexi.
Longines y también Hamilton tienen varios modelos que son una reedición de clásicos vintage. Yo creo que estos relojes no los compra casi nadie, porque todo el mundo va a los modelos más famosos (El Hydroconquest en Longines, y el Khaki en Hamilton por ejemplo) pero ahí están, son vintages pero son nuevos.
Cómpralo nuevo y tendrás un vintage doblemente exclusivo: porque nació para ti, y porque es vintage pero nació en el siglo XXI.
Edito: aquí tienes por ejemplo un Longines Flagship, es un vintage del siglo XXI:
https://www.longines.com/watches/heritage-collection/l4-795-4-78-2
Un Vostok Amphibia se acercaría más a eso que tú propones: Vostok es aún una manufactura relojera con sus propios calibres, que además siguen siendo básicamente como han sido siempre, hace décadas; por eso están anticuados en cosas como el pase semi rápido de fecha. Si compras un Vostok Amphibia sí que estás comprando un reloj "vintage" fabricado hoy día, porque, este sí, es como eran hace décadas. Y no solo en el plexi, en el calibre, que es algo fundamental, y en la propia esencia y los genes de la firma, que siguen siendo Vostok.
Un Longines o un Certina, Tissot, Oris y muchas más, al final, por dentro son todos iguales. Sigo valorando mucho el tener Certina de la edad dorada de las manufacturas propias, con sus calibres propios, que además eran maravillosos. Es una pena que se dejasen de fabricar los calibres propios de tantas buenas marcas como había, y lo mejor del mercado de vintages es poderlos conseguir, recuperar gracias a los buenos relojeros que saben ponerlos al día, y cuidar con mimo. No se puede comparar un buen vintage con un reloj actual, son maravillosos los dos, pero por distintos motivos, son cosas y sensaciones diferentes.
Y aún siendo un Vostok, que sí se parece mucho más a los auténticos vintage de la firma, tampoco es lo mismo. Siempre hay detalles interesantes, cambios, motivos por los que una pieza con años y solera se puede haber hecho histórica, o al menos interesante para el conocedor.
Además, es muy fácil conseguir buenos vintage en todas las gamas de precio, y tenerlos en perfecto funcionamiento; el foro es una buena muestra, aquí se enseñan decenas de vintages maravillosos todas las semanas, y se usan y disfrutan. La única pena es que cada vez haya menos relojeros capacitados para mantenerlos, pero será por relojes vintage auténticos y en buen estado...
Aún así, es verdad que hay relojes ahora que me son muy atractivos porque me recuerdan a los de hace décadas, como puede ser el Longines Conquest. Pero insisto, un Seiko 5 por ejemplo, al haber seguido Seiko siendo manufactura, y no haber perdido su identidad ni por dentro ni por fuera, se parece más a un Seiko 5 de hace 40 años que cualquier otro reloj, y es una de las cosas que me gustan de marcas como Seiko. No obstante, tener un Seiko 7005 es algo muy atractivo, y diferente. Su calibre es el origen de los Seiko 5, otros Seiko más grandes y los Orient 469...ahí es nada, es algo muy atractivo tener en la mano tu Seiko 7005 de 1969, es historia de la relojería japonesa.