hace menos de una hora, suena el timbre del despacho, es la cartera, hay algo para mi:
Abro el sobre, una carta de mi amigo invisible y un paquete envuelto en papel de plata. en un primer momento mis jugos gástricos piensan por mi (hace cuatro horas que no les echo nada para que se entretengan) y me hacen exclamar: ¡un bocata!
Me tiro de cabeza a pelar el presunto bocata... ¿de qué será?:
¡Co.....! ¿Estos también hacen bocatas? Me suena a mi que no, que con ese envoltorio el tema es de "Haute Cuisine"...
Y sí que lo es, sí, de tres estrellas Michelín:
¡Toma relojazo!
Un Myday, ancre 15 rubis, Swiss Made... NOS... Todavía no he conseguido cerrar la boca.
Querido Amigo Invisible: un millón de gracias. El regalo es un regalazo, y has acertado de pleno ya que últimamente estaba a la caza y captura de algún vintage de esta época y estilo.
Has acertado con lo que buscaba al 100 %: buen tamaño (40mm), esfera clara, subesfera grande de segundos a las seis, índices y números claros y limpios, ... ¡una maravilla!
Momento mágico: ya en la muñeca, dos vueltas a la corona y... el segundero comienza a andar con una elegancia espectacular.
Mirad qué bien queda esta preciosidad:
Estoy emocionado y super agradecido a mi amigo invisible. No sé qué decir salvo gracias, AMIGO, un abrazo; y gracias a Zampetti y Mayca por volver a darnos a los que no participamos la edición anterior la ocasión de hacerlo ahora.