Claudio
Baneado

Texto:
A propósito del concurso de cronómetros
de marina en Hamburgo
El Diario Suizo de Relojería, que ha
publicado en su número de octubre la
tabla completa de este concurso, termina
su interesante artículo con las consideraciones
siguientes, concernientes al empleo de los balancines
Guillaume:
Observaremos que el balancín de acero-níquel
ha suplantado completamente a los de
compensación auxiliar: su éxito ha sido,
se puede decir sin exageración, fulminante,
por lo menos en materia de relojería,
porque hace solamente ocho años que
hizo por primera vez su aparición en
el observatorio de Hamburgo. A este respecto,
la tabla siguiente es de lo más sugestiva: