Cuando empecé en esta afición no entendía por qué tanta repulsión hacia las falsificaciones.
Ahora que llevo unos años, no sólo entiendo dicha repulsión, sino que la comparto plenamente.
Cada cual que haga lo que quiera mientras no haga daño a nadie. Yo sería incapaz de mentir en una entrevista de trabajo arrogándome un título que no poseo, o una experiencia que no tengo, y sin embargo mucha gente lo hace.
No soportaría una falsificación ni un solo minuto y el único uso que admito de una falsificación es el humorístico: hacerle fotos para exponerla en un foro de aficionados y reirnos todos de la basura de producto que es. Reirnos por no llorar pensando en los pobres ignorantes, o peor aún, pobres de espíritu que compran esas porquerías.
¿De verdad alguien cree que puede llegar a algo en la vida comprando una mala copia de un Rolex, un Omega, o un PP? se equivoca. En la vida nadie regala nada.
Estoy plenamente convencido de que merece la pena comprar un reloj auténtico. Vivir toda una vida rodeado de buenos relojes, de buenas marcas. No necesariamente los más caros. Pero sí buenos relojes.
Sin saberlo, estás creando un estilo. Da igual que lleves un Pulsar o un Hamilton o un Lotus, mientras sientas que has elegido lo que llevas en la muñeca porque se adapta a tu forma de ser.
En cambio el que compra una falsificación, compra un sueño prestado. Si de verdad quisiera un Rolex, o un Omega, lucharía por tenerlo de verdad, que no es tan difícil caramba, que hay infinidad de marcas de todos los precios, está el mercado de segunda mano y siempre hay ofertas y oportunidades en los foros. El que no tiene un Omega, o un Rolex, es porque no se lo ha propuesto seriamente. Seguro que a nadie se le pasaría por la cabeza ir a trabajar en un coche falsificado ¿verdad? Imaginad que hubiera una marca que pirateara los Volkswagen Golf. Me pregunto si un admirador del VW Golf compraría la mala imitación, en vez de perseguir el sueño auténtico.
Para terminar, me remito al eslogan comercial de L'OREAL. Esta marca comercializa productos de cierto nivel de precios. Y para justificar su adquisición, dice: "PORQUE YO LO VALGO"
Pues bien yo me compré un Omega nuevo PORQUE YO LO VALGO

a lo mejor ciertos sujetos miserables consideran que soy tonto y que ellos son listos por comprar una mala copia en un mercadillo. Allá ellos. Yo tengo claro que sin ser alguien especialmente importante, no voy a renunciar a pasar por esta vida sin darme el gusto de llevar un buen reloj de buena marca, "PORQUE YO LO VALGO"

y por cierto tengo unos cuantos Seikos y Pulsar y también me los pongo sin complejo alguno, "Porque yo lo valgo", y de las falsificaciones, lo que hay que hacer es reírse. De ellas, no de sus portadores. A estos últimos hay que compadecerles.