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Estos días he dado un repaso a un pequeño reloj Lip perteneciente a un amigo francés.
Lip es una marca francesa que tuvo mucho éxito hace unos cuantos años y que es muy apreciada por los franceses.
El reloj está en muy buen estado de conservación, pero tiene unas averías típicas de haber pasado por unas manos no demasiado expertas.
Lo mas importante, tiene la espiral ligeramente torcida. Ademas de esto, se han perdido dos piezas, el casquillo o anillo de la rueda de corona, que simplemente no está y el resorte del trinquete, el cual ha sido sustituido por otro que no funciona.
La deformación de la espiral es pequeña, pero suficiente para que el volante no funcione. En su lado de la izquierda, en la imagen, la espiral está toda apretada. En la parte de abajo de la fotografía se puede adivinar una zona deformada, que podría ser el origen del problema.
Soltando el puente del volante, se puede ver la espiral entera. Efectivamente está totalmente asimétrica.
Viéndola así, se tienen tentaciones de intentar un pequeño “toque” en la espiral, en la zona que está justo pasada la llave de regulación, que teóricamente devolvería la espiral a la simetría. Parece fácil y rápido.
Pues bien, la experiencia me ha enseñado que este tipo de acciones rara vez suelen funcionar. Es mucho mejor soltar la espiral del puente del volante, para poder ver mejor el alcance de la deformación sin que esta esté sujeta por su extremo.
Con el volante fuera de su puente, se ve que, ademas de asimétrica, la ultima espira esta fuera de plano.
Efectivamente, hay otra deformación mas, La ultima espira está fuera del plano de la espiral. Primero, en la derecha de la imagen, la espiral se acerca al volante, después, en el centro, se separa mucho hacia arriba.
En la siguiente imagen vemos que ademas de salirse de su plano, la falta de uniformidad de la espiral viene de casi una vuelta antes del final de la espiral, donde la separación entre las espiras aumenta poco a poco..
Está claro que conviene sacar la espiral del eje volante, para poder manipularla sin tener estorbos de por medio.
Una vez suelta, el siguiente paso es muy importante. Hay que estudiar muy bien como es la deformación y planear una estrategia para corregirla.
Una vez que tenemos una estrategia preparada, llevarla a cabo también es difícil. Pero intentar la corrección sin tener una estrategia, es mucho mas difícil.
Mi estrategia comienza por intentar llevar primero la ultima vuelta dentro de un mismo plano.
Comienzo por la desviación mas pequeña, mas suave, que se dirige hacia abajo.
Vemos el antes y el después.
A continuación, y solo en esa misma zona, intento uniformizar la separación de las espiras.
Por cierto, vemos, por la sombra de la espiral, que el extremo de la espiral está todavía esta dirigido muy hacia arriba.
Después nos concentramos con la siguiente deformación, la que es mas fuerte y se dirige hacia arriba.
Otra vez el antes y el después.
Solo hay una fotografiá del antes y después, pero como ya podarais imaginar, estas correcciones se hacen muy poco a poco, al empezar siempre intentas quedarte corto y vas haciendo un poquito mas de fuerza cada vez, siempre intentando no pasarse por el otro lado.
En fin, yo creo que la cuestión es mitad de paciencia y mitad de suerte.
Ahora que ya está toda la espiral dentro de un mismo plano, retocamos la parte que está mas separada del resto, la zona en la que la sujeta la raqueta. Buscamos devolverle a esta zona un radio de giro uniforme.
Comprobamos que, después de la ultima rectificación, la espiral continua estando bien plana. Cualquier deformación en su planitud hará que la espiral roce o bien con los brazos del volante o bien con el puente del volante.
Parece que el problema está todo resuelto, pero mas adelante veremos que no del todo.
Para colocar la espiral, en el eje volante, utilizo una pequeña superficie de madera donde he realizado unos orificios para que el eje volante, los platillos y la elipse queden al aire, sin recibir ninguna presión.
Nuestra flamante espiral, que casi parece nueva, ya está colocada.
Después montamos todo el volante en su puente.
Por cierto, como ya habréis notado, este movimiento no lleva pitón en el final de la espiral. Para sujetar el extremo de la espiral lleva un sistema que la aprisiona mediante un tornillo.
Esto tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Primero hay que meter el delgado extremo de la espiral en una pequeña ranura.
Después hay que apretar el tornillo, con la espiral en la posición correcta, sin que se tuerza hacia arriba o abajo.
Antes comentaba que el problema no estaba resuelto.
Al colocar la espiral, resulta que no funciona bien, volvía a estar asimétrica. En una de las zonas, varias espiras están unidas.
Resulta que, el final de la espiral tiene una separación extra para la llave y la sujeción de la punta de la espiral al puente. Es ese ultimo trozo que se ve mucho mas separado del resto de las espiras.
Pues bien, para estar seguro de que todo es correcto, debería haber medido la distancia que hay entre el eje del volante y la llave de la raqueta y después debería haber comprobado que esta es la distancia que separa esta ultima parte de la espiral del centro de la virola.
Fue bastante necio pensar que sin haber comprobado esto, la medida sería correcta.
Hay que comprobar que las dos flechas rojas y las dos flechas verdes coinciden perfectamente.
Pues bien, en este caso no coincidían y por tanto, la espiral no quedaba bien centrada. Esto es algo que solo se hace evidente cuando se monta el puente del volante en su sitio y supone recibir un buen jarro de agua fría, cuando uno se las promete muy felices.
Después de montado todo, hubo que volver a sacarlo y volver a retocar la espiral para que estas medidas fuesen correctas. En concreto, el codo que esta señalado con una flecha morada, que era bastante suave al principio, hubo que hacerlo mucho mas agudo, para que las medidas casasen bien. Siento no tener buenas fotografiás de esta parte.
Una vez solucionado esto, ya todo marchó perfectamente.
Unas imágenes del volante funcionando a todo gas. He colocado otra flecha morada en el codo que hubo que hacer mas agudo, para compararlo con el de la fotografiá anterior.
Viendo esta fotografiá da la sensación de que en la parte de la derecha, las espiras vuelven a tocarse. Esto de las espiras tocándose se ha convertido ya en una psicosis.
Pues si que se acercan mucho, pero afortunadamente sin llegar a tocarse.
En esta fotografiá el volante está comprimiendo la espiral y esto junta las espiras, pero en la siguiente fotografía vemos el giro opuesto del volante y las espiras quedan muy separadas.
En todo caso, el movimiento pasó por el crono-comparador y su comportamiento fue correcto, lo cual es la mejor prueba de que la espiral está trabajando bien.
Mas adelante,cuando tenga un rato, os contaré las otras reparaciones de este reloj.
Como siempre, espero que os haya entretenido.
Un saludo.
Lip es una marca francesa que tuvo mucho éxito hace unos cuantos años y que es muy apreciada por los franceses.
El reloj está en muy buen estado de conservación, pero tiene unas averías típicas de haber pasado por unas manos no demasiado expertas.
Lo mas importante, tiene la espiral ligeramente torcida. Ademas de esto, se han perdido dos piezas, el casquillo o anillo de la rueda de corona, que simplemente no está y el resorte del trinquete, el cual ha sido sustituido por otro que no funciona.
La deformación de la espiral es pequeña, pero suficiente para que el volante no funcione. En su lado de la izquierda, en la imagen, la espiral está toda apretada. En la parte de abajo de la fotografía se puede adivinar una zona deformada, que podría ser el origen del problema.
Soltando el puente del volante, se puede ver la espiral entera. Efectivamente está totalmente asimétrica.
Viéndola así, se tienen tentaciones de intentar un pequeño “toque” en la espiral, en la zona que está justo pasada la llave de regulación, que teóricamente devolvería la espiral a la simetría. Parece fácil y rápido.
Pues bien, la experiencia me ha enseñado que este tipo de acciones rara vez suelen funcionar. Es mucho mejor soltar la espiral del puente del volante, para poder ver mejor el alcance de la deformación sin que esta esté sujeta por su extremo.
Con el volante fuera de su puente, se ve que, ademas de asimétrica, la ultima espira esta fuera de plano.
Efectivamente, hay otra deformación mas, La ultima espira está fuera del plano de la espiral. Primero, en la derecha de la imagen, la espiral se acerca al volante, después, en el centro, se separa mucho hacia arriba.
En la siguiente imagen vemos que ademas de salirse de su plano, la falta de uniformidad de la espiral viene de casi una vuelta antes del final de la espiral, donde la separación entre las espiras aumenta poco a poco..
Está claro que conviene sacar la espiral del eje volante, para poder manipularla sin tener estorbos de por medio.
Una vez suelta, el siguiente paso es muy importante. Hay que estudiar muy bien como es la deformación y planear una estrategia para corregirla.
Una vez que tenemos una estrategia preparada, llevarla a cabo también es difícil. Pero intentar la corrección sin tener una estrategia, es mucho mas difícil.
Mi estrategia comienza por intentar llevar primero la ultima vuelta dentro de un mismo plano.
Comienzo por la desviación mas pequeña, mas suave, que se dirige hacia abajo.
Vemos el antes y el después.
A continuación, y solo en esa misma zona, intento uniformizar la separación de las espiras.
Por cierto, vemos, por la sombra de la espiral, que el extremo de la espiral está todavía esta dirigido muy hacia arriba.
Después nos concentramos con la siguiente deformación, la que es mas fuerte y se dirige hacia arriba.
Otra vez el antes y el después.
Solo hay una fotografiá del antes y después, pero como ya podarais imaginar, estas correcciones se hacen muy poco a poco, al empezar siempre intentas quedarte corto y vas haciendo un poquito mas de fuerza cada vez, siempre intentando no pasarse por el otro lado.
En fin, yo creo que la cuestión es mitad de paciencia y mitad de suerte.
Ahora que ya está toda la espiral dentro de un mismo plano, retocamos la parte que está mas separada del resto, la zona en la que la sujeta la raqueta. Buscamos devolverle a esta zona un radio de giro uniforme.
Comprobamos que, después de la ultima rectificación, la espiral continua estando bien plana. Cualquier deformación en su planitud hará que la espiral roce o bien con los brazos del volante o bien con el puente del volante.
Parece que el problema está todo resuelto, pero mas adelante veremos que no del todo.
Para colocar la espiral, en el eje volante, utilizo una pequeña superficie de madera donde he realizado unos orificios para que el eje volante, los platillos y la elipse queden al aire, sin recibir ninguna presión.
Nuestra flamante espiral, que casi parece nueva, ya está colocada.
Después montamos todo el volante en su puente.
Por cierto, como ya habréis notado, este movimiento no lleva pitón en el final de la espiral. Para sujetar el extremo de la espiral lleva un sistema que la aprisiona mediante un tornillo.
Esto tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Primero hay que meter el delgado extremo de la espiral en una pequeña ranura.
Después hay que apretar el tornillo, con la espiral en la posición correcta, sin que se tuerza hacia arriba o abajo.
Antes comentaba que el problema no estaba resuelto.
Al colocar la espiral, resulta que no funciona bien, volvía a estar asimétrica. En una de las zonas, varias espiras están unidas.
Resulta que, el final de la espiral tiene una separación extra para la llave y la sujeción de la punta de la espiral al puente. Es ese ultimo trozo que se ve mucho mas separado del resto de las espiras.
Pues bien, para estar seguro de que todo es correcto, debería haber medido la distancia que hay entre el eje del volante y la llave de la raqueta y después debería haber comprobado que esta es la distancia que separa esta ultima parte de la espiral del centro de la virola.
Fue bastante necio pensar que sin haber comprobado esto, la medida sería correcta.
Hay que comprobar que las dos flechas rojas y las dos flechas verdes coinciden perfectamente.
Pues bien, en este caso no coincidían y por tanto, la espiral no quedaba bien centrada. Esto es algo que solo se hace evidente cuando se monta el puente del volante en su sitio y supone recibir un buen jarro de agua fría, cuando uno se las promete muy felices.
Después de montado todo, hubo que volver a sacarlo y volver a retocar la espiral para que estas medidas fuesen correctas. En concreto, el codo que esta señalado con una flecha morada, que era bastante suave al principio, hubo que hacerlo mucho mas agudo, para que las medidas casasen bien. Siento no tener buenas fotografiás de esta parte.
Una vez solucionado esto, ya todo marchó perfectamente.
Unas imágenes del volante funcionando a todo gas. He colocado otra flecha morada en el codo que hubo que hacer mas agudo, para compararlo con el de la fotografiá anterior.
Viendo esta fotografiá da la sensación de que en la parte de la derecha, las espiras vuelven a tocarse. Esto de las espiras tocándose se ha convertido ya en una psicosis.
Pues si que se acercan mucho, pero afortunadamente sin llegar a tocarse.
En esta fotografiá el volante está comprimiendo la espiral y esto junta las espiras, pero en la siguiente fotografía vemos el giro opuesto del volante y las espiras quedan muy separadas.
En todo caso, el movimiento pasó por el crono-comparador y su comportamiento fue correcto, lo cual es la mejor prueba de que la espiral está trabajando bien.
Mas adelante,cuando tenga un rato, os contaré las otras reparaciones de este reloj.
Como siempre, espero que os haya entretenido.
Un saludo.
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