Lucense
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Fuente : Suplemento Diario "La Nación "(Argentina )
En punto, las últimas novedades de relojería: las da Tag Heuer, de la mano de Philippe Alluard, presidente de la marca para el Caribe y América latina, llegado de Suiza. Recibe en las oficinas de Darssa, su distribuidora oficial en la Argentina, desde 1987. Ahora, la marca históricamente ligada al deporte (ocho años cronometradora de los Juegos Olímpicos de Ambares, París y Amsterdam, otros ocho de la Escudería Ferrari, once del Campeonato de Fórmula 1 y otros tantos del Indy Racing League) busca conquistar desde el glamour. Alluard habla de las estrategias para conseguirlo.
-¿Tag Heuer quiere abandonar los deportes?
-Abandonarlos, nunca. Desde 2004 nos proponemos dejar de ser una marca estrictamente deportiva y ganar glamour. Por eso ampliamos el desarrollo de productos femeninos, incorporando diamantes en los cuadrantes de varias gamas, y multiplicamos nuestros embajadores fuera del ámbito deportivo. Actualmente el 65% de nuestros consumidores son hombres y sólo el 35% mujeres. La intención es, en tres años, duplicar la cantidad de mujeres que nos elijan.
-¿Hay más presencia en el mundo del espectáculo?
-Sí. Desde el lanzamiento de la línea Alter Ego tuvimos participación en varias películas. En Collateral, Tom Cruise lleva un Cronógrafo Carrera; en Closer Julia Roberts usa un Carrera Twin Time y Clive Owen, un Cronógrafo Monza. También Johnny Depp, en La ventana secreta; Leonardo DiCaprio, en Atrápame si puedes, y Colin Farrell, en La prueba, llevan modelos Heuer.
-Lo último...
-Vuelve el tamaño clásico, cuadrante de 27 milímetros de diámetro; en cambio, la innovación pasa por sumar diamantes y madreperlas en piezas de acero inoxidable (para no elevar tanto los costos) y esmaltados en colores de moda.
-¿Qué lugar ocupa Tag Heuer en el mundo?
-Es la cuarta marca de relojería suiza de lujo, detrás de Rolex, Cartier y Omega. Sin embargo, en la Argentina somos número uno, la más vendida.
-¿Cómo es el mercado local?
-La Argentina, México y Brasil representan el 30% del mercado de América latina. Hasta la crisis de 2001, la Argentina siempre fue el país líder de la región. En la primera mitad de 2002 tuvimos una caída en las ventas, pero está casi superada. En 2003 recuperamos el 30% del mercado y en 2004, el 60%, con un total de 3784 relojes vendidos. Creemos que este año estaremos restablecidos.
-¿El secreto del éxito?
-Somos una marca de lujo, pero de aspecto más descontracturado que otras suizas del mismo segmento. Eso es lo que busca nuestro cliente. Además, llevamos muchos años en la Argentina. De paseo por San Telmo me crucé con piezas de principio de siglo. De colección. ¡Y muy baratas!
-¿La producción anual?
-Estamos en el medio millón de piezas. Tag Heuer tiene una planta exclusiva en Suiza, donde se realiza desde el desarrollo técnico de nuevos sistemas y modelos hasta los controles de calidad en cada etapa del armado de los relojes. Actualmente, el número de arreglos en garantía es inferior a uno en mil. Y de este porcentaje se estima que la mitad llega por mal uso y no por fallas estructurales.
-¿Qué viene?
-La llegada, en noviembre, de Calibre 360 Concept Chronograph, el reloj más exacto fabricado hasta el momento. Es capaz de medir el tiempo con la precisión de una centésima de segundo y con una frecuencia de oscilación de 360.000 alternativas por hora (diez veces mayor que la de cualquier otro cronógrafo). Está inspirado en los motores de alta tecnología y llegará sólo a las mejores joyerías del mundo, es una serie limitada de 360 piezas.
-¿Primera vez en Buenos Aires?
-He venido unas cuantas veces. Pasado mañana me voy a ir al Tigre, porque tengo un antojo: me quiero comprar un bote de madera. ¡Los que se consiguen acá me encantan!
-Enhorabuena...
Por Paula Cipriani
En punto, las últimas novedades de relojería: las da Tag Heuer, de la mano de Philippe Alluard, presidente de la marca para el Caribe y América latina, llegado de Suiza. Recibe en las oficinas de Darssa, su distribuidora oficial en la Argentina, desde 1987. Ahora, la marca históricamente ligada al deporte (ocho años cronometradora de los Juegos Olímpicos de Ambares, París y Amsterdam, otros ocho de la Escudería Ferrari, once del Campeonato de Fórmula 1 y otros tantos del Indy Racing League) busca conquistar desde el glamour. Alluard habla de las estrategias para conseguirlo.
-¿Tag Heuer quiere abandonar los deportes?
-Abandonarlos, nunca. Desde 2004 nos proponemos dejar de ser una marca estrictamente deportiva y ganar glamour. Por eso ampliamos el desarrollo de productos femeninos, incorporando diamantes en los cuadrantes de varias gamas, y multiplicamos nuestros embajadores fuera del ámbito deportivo. Actualmente el 65% de nuestros consumidores son hombres y sólo el 35% mujeres. La intención es, en tres años, duplicar la cantidad de mujeres que nos elijan.
-¿Hay más presencia en el mundo del espectáculo?
-Sí. Desde el lanzamiento de la línea Alter Ego tuvimos participación en varias películas. En Collateral, Tom Cruise lleva un Cronógrafo Carrera; en Closer Julia Roberts usa un Carrera Twin Time y Clive Owen, un Cronógrafo Monza. También Johnny Depp, en La ventana secreta; Leonardo DiCaprio, en Atrápame si puedes, y Colin Farrell, en La prueba, llevan modelos Heuer.
-Lo último...
-Vuelve el tamaño clásico, cuadrante de 27 milímetros de diámetro; en cambio, la innovación pasa por sumar diamantes y madreperlas en piezas de acero inoxidable (para no elevar tanto los costos) y esmaltados en colores de moda.
-¿Qué lugar ocupa Tag Heuer en el mundo?
-Es la cuarta marca de relojería suiza de lujo, detrás de Rolex, Cartier y Omega. Sin embargo, en la Argentina somos número uno, la más vendida.
-¿Cómo es el mercado local?
-La Argentina, México y Brasil representan el 30% del mercado de América latina. Hasta la crisis de 2001, la Argentina siempre fue el país líder de la región. En la primera mitad de 2002 tuvimos una caída en las ventas, pero está casi superada. En 2003 recuperamos el 30% del mercado y en 2004, el 60%, con un total de 3784 relojes vendidos. Creemos que este año estaremos restablecidos.
-¿El secreto del éxito?
-Somos una marca de lujo, pero de aspecto más descontracturado que otras suizas del mismo segmento. Eso es lo que busca nuestro cliente. Además, llevamos muchos años en la Argentina. De paseo por San Telmo me crucé con piezas de principio de siglo. De colección. ¡Y muy baratas!
-¿La producción anual?
-Estamos en el medio millón de piezas. Tag Heuer tiene una planta exclusiva en Suiza, donde se realiza desde el desarrollo técnico de nuevos sistemas y modelos hasta los controles de calidad en cada etapa del armado de los relojes. Actualmente, el número de arreglos en garantía es inferior a uno en mil. Y de este porcentaje se estima que la mitad llega por mal uso y no por fallas estructurales.
-¿Qué viene?
-La llegada, en noviembre, de Calibre 360 Concept Chronograph, el reloj más exacto fabricado hasta el momento. Es capaz de medir el tiempo con la precisión de una centésima de segundo y con una frecuencia de oscilación de 360.000 alternativas por hora (diez veces mayor que la de cualquier otro cronógrafo). Está inspirado en los motores de alta tecnología y llegará sólo a las mejores joyerías del mundo, es una serie limitada de 360 piezas.
-¿Primera vez en Buenos Aires?
-He venido unas cuantas veces. Pasado mañana me voy a ir al Tigre, porque tengo un antojo: me quiero comprar un bote de madera. ¡Los que se consiguen acá me encantan!
-Enhorabuena...
Por Paula Cipriani
