Muy buenas a todos,
He de confesaros, amigos, que tengo un gran miedo. Bueno, mejor dicho, hasta el día de hoy, lo he tenido.
Siempre he odiado los arañazos en los cristales de los relojes.
Si se araña un poquito la caja igual no le doy mucha importancia, pero si se me araña el cristal, ya no...