Fernando Burón
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Luego de un diálogo con el forero Pedro Oar , quién plantea la disminución del uso de relojes por parte de los jóvenes y su reemplazo por dispositivos telefónicos móviles , me propuse analizar y mostrar lo que ha sucedido con la evolución del reloj , visto desde nuestras particulares existencias y, cómo se puede augurar su futuro.
La historia del siglo XX es demasiado compleja y apabullante , llena de logros y bajezas , impresionante en cuanto a evolución y desarrollo ; en el pasado siglo parece haberse consumado los mayores logros y desafíos humanos , fuimos al fondo del mar, a la cumbre más alta y a la Luna , a todos esos lugares nos acompañó un reloj en particular y para consumar el logro fue necesario desarrollar instrumentos únicos y especiales , capaces de ayudarnos en el logro impuesto, de navegación, de orientación, medición, etc…
Asi , en toda esa historia los instrumentos y sistemas de medición y, los relojes, tuvieron mucha participación y casi podríamos decir que sin ellos tales logros y desarrollo no habrían sido posibles, por tanto y con mucho respeto al peso de la historia, he aquí que hago una brevísima “reseña” del siglo XX en forma de una muestra de mis relojes a través de sus décadas y los diferentes artificios e instrumentos que les acompañaron en la aventura de este siglo que casi todos vivimos en gran parte, dichos instrumentos y relojes son los que usaron nuestros abuelos , padres y también nosotros.
Si miramos el reloj de inicios del siglo XX y los actuales , veremos una gran similitud conceptual – Horas, Minuto, Segundos - Ha transcurrido un siglo y el Hombre mantiene el reloj como Un Instrumento y un objeto de Status, glamour y vanidad , casi nada ha variado , excepto las dimensiones, la materialidad y, obviamente los mecanismos internos pero, sigue siendo el que nos acompaña en nuestra vida cotidiana con prestancia, elegancia, seguridad, independencia y vanidad ( ¡por qué nó !) .
El resto de los instrumentos desarrollados por el hombre han tenido un auge, expansión y decadencia, transformándose paulatinamente en objetos de museo, atropellados por la obsolescencia.
Década de 1910
Las unidades de peso eran tan diversas como las naciones, aún no era de uso común el Sistema Métrico Decimal y para diversos tipos de “pesada” , se usaba la Balanza de platillo, la cuál aceptaba “pesos” en onzas o en gramos , según uso, país, etc . Acá el detalle en la Base de una Balanza Seederer KOHLBUSCH está un peso correspondiente a 1 onza ( 1/12 de Libra aprox. ), esta unidad de medida , aún en uso en algunos países , se remonta a la antigüedad , le acompaña un Waltham de 1905, también americano , size 18 , un reloj de bolsillo de gran tamaño , de unos 58 mm de diámetro y 150 gramos de pesos , su mecanismo era aún muy delicado y poco preciso.
Década de 1920.
El mundo marchaba aceleradamente en Comercio, Ciencia y Desarrollo Humano, para facilitar todo ello se crearon máquinas como el Aritmógrafo , precursor de las modernas calculadoras, que facilitaban el manejo de las matemáticas ..Acá un aritmógrafo Alemán Addiator, que realiza las 4 operaciones, acompañando a un reloj de bolsillo Longines calibre 17.27, mecanismo robusto y fiable, aún en funcionamiento.
Década de 1930.
El hombre sale a redescubrir todos los lugares aún inexplorados , para ello se provee de todo tipo de instrumentos , como este nivel de ingeniero, le acompaña en su muñeca una reciente innovación , el reloj de pulsera, como este Cyma con anillas incorporadas a la caja.
Década de 1940
En esta década todos los instrumentos alcanzaron logros increíbles, para ello se usaron materiales nobles como el bronce , acá un Caliper Stanley de 3”, que permite mediciones muy fiables en pulgadas americanas , acompañado de un reloj de bolsillo Ferroviario, Waltham Vanguard size 16 de 1943, de gran precisión y confianza ( +/- 4 seg/día ), que permitía el movimiento seguro de una red ferroviaria, el reloj se integraba plenamente a la vida y al trabajo cotidiano.
Década de 1950
El desarrollo humano alcanzaba grandes logros , el comercio mundial se incrementó y alcanzaba nuevas fronteras, lo cuál demandaba mejores medios e instrumentos, como esta calculadora Alemana de molinete de cuatro operaciones , marca Schubert, que puso los cálculos esenciales al alcance de todos de manera sencilla y fiable, la mayoría de los relojes eran aún de carga manual , como este Movado de 1953.
Década de 1960.
El desarrollo técnico y aeronáutico y , la sociedad del conocimiento requieren más herramientas al alcance de la mano, como esta Regla de Cálculo Faber Castell de 1967 , acompañada por dos íconos relojeros del desarrollo aeronáutico de aquella década , el Universal Polerouter y el Rolex GMT, los automáticos comenzaban a imponerse en todos los ámbitos.
Década de 1970.
Son años de Bonanza y consolidación post Guerra Fría , la industria y el comercio empiezan a copar el mundo , los cálculos requieren precisión y rapidez , lo que es proveído por las modernas y programables calculadoras manuales, como esta HP científica, en tanto el reloj ha ganado en elegancia y glamour , como este Zenith de 1975 .
Década de 1980.
La industria relojera está en Crisis , Oriente parece invadirlo todo con las nuevas tecnologías digitales , que también invaden otras áreas del desarrollo humano , un instrumento de uso doméstico como una Balanza de Cocina posee ya un lector digital y aún mantiene las lecturas en sistema Inglés ( onzas ) y de gramos , le acompaña un reloj digital clásico de la Década , el Casio F-91W.
De los 150 gramos iniciales, el reloj se ha reducido más de 7 veces, hasta llegar a sólo 20 gramos.
Década de 1990.
Las comunicaciones rápidas y expeditas son ya parte esencial del Comercio y de todo el desarrollo humano, lo cuál podemos apreciar en este Teléfono portátil Nokia de fines de aquella década, acompañado de un Seiko Cronograph Análogo , las manecillas volvían por sus fueros .
La incorporación de un registro digital de la hora en el telefóno portátil iniciaba la disminución masiva del reloj en la muñeca humana, especialmente en la femenina…
Primera Década del Nuevo Milenio.
El desarrollo tecnólogico alcanza nuevas cimas , el Sistema de Posicionamiento Global es puesto al alcance de todos, en nuestras manos está graficada toda nuestra Tierra y nos permite viajar sin contratiempos a través de cualquier ruta terrestre o aérea . Acá un GPS Garmin , que muestra con un precisión de +/- 4 metros el lugar de la Tierra dónde me encuentro , le acompaña un reloj de piloto “Cuatro Vientos”, que establece un vínculo entre ese pasado glorioso y el ancho mundo de las nuevas tecnologías , como el GPS , que posee un fino sistema relojeril que mide el “Tiempo que tarda la señal de radio emitida, en ir y volver hacia los 4 satélites” de mejor ubicación para ese punto y que permite realizar la “emulación” de un reloj atómico en su interior, la medición de los tiempos hacia cada uno de los 4 satélites permite obtener sus respectivas distancias a ellos y, por ende el procesador interno realiza una triangulación determinando el punto dónde se encuentra el observador , vale decir es el reloj del GPS el que permite la localización exacta del punto.
Resumen y Conclusión
A pesar de todos estos desarrollos, la historia muestra que el reloj se ha mantenido y prevalecido como fiel compañero, cómplice mudo de todas nuestras acciones, en lo cotidiano y también en lo excepcional, siendo a la vez un instrumento, una joya y, un símbolo de status , de elegancia y personalidad.
Entonces al parecer habrá manecillas de horas, minutos y segundos marchando sobre esferas circulares por mucho tiempo más … El reloj es un sobreviviente porque vivimos inmersos en el río del tiempo y no podemos sustraernos a ello.. Llegará quizá el día en que el único objeto-instrumento-identificación-adorno – etc., que acompañe la existencia humana se encuentre en nuestra muñeca….
A ver que opinaís sobre todo esto.
Mis saludos a todos.
La historia del siglo XX es demasiado compleja y apabullante , llena de logros y bajezas , impresionante en cuanto a evolución y desarrollo ; en el pasado siglo parece haberse consumado los mayores logros y desafíos humanos , fuimos al fondo del mar, a la cumbre más alta y a la Luna , a todos esos lugares nos acompañó un reloj en particular y para consumar el logro fue necesario desarrollar instrumentos únicos y especiales , capaces de ayudarnos en el logro impuesto, de navegación, de orientación, medición, etc…
Asi , en toda esa historia los instrumentos y sistemas de medición y, los relojes, tuvieron mucha participación y casi podríamos decir que sin ellos tales logros y desarrollo no habrían sido posibles, por tanto y con mucho respeto al peso de la historia, he aquí que hago una brevísima “reseña” del siglo XX en forma de una muestra de mis relojes a través de sus décadas y los diferentes artificios e instrumentos que les acompañaron en la aventura de este siglo que casi todos vivimos en gran parte, dichos instrumentos y relojes son los que usaron nuestros abuelos , padres y también nosotros.
Si miramos el reloj de inicios del siglo XX y los actuales , veremos una gran similitud conceptual – Horas, Minuto, Segundos - Ha transcurrido un siglo y el Hombre mantiene el reloj como Un Instrumento y un objeto de Status, glamour y vanidad , casi nada ha variado , excepto las dimensiones, la materialidad y, obviamente los mecanismos internos pero, sigue siendo el que nos acompaña en nuestra vida cotidiana con prestancia, elegancia, seguridad, independencia y vanidad ( ¡por qué nó !) .
El resto de los instrumentos desarrollados por el hombre han tenido un auge, expansión y decadencia, transformándose paulatinamente en objetos de museo, atropellados por la obsolescencia.
Década de 1910
Las unidades de peso eran tan diversas como las naciones, aún no era de uso común el Sistema Métrico Decimal y para diversos tipos de “pesada” , se usaba la Balanza de platillo, la cuál aceptaba “pesos” en onzas o en gramos , según uso, país, etc . Acá el detalle en la Base de una Balanza Seederer KOHLBUSCH está un peso correspondiente a 1 onza ( 1/12 de Libra aprox. ), esta unidad de medida , aún en uso en algunos países , se remonta a la antigüedad , le acompaña un Waltham de 1905, también americano , size 18 , un reloj de bolsillo de gran tamaño , de unos 58 mm de diámetro y 150 gramos de pesos , su mecanismo era aún muy delicado y poco preciso.
Década de 1920.
El mundo marchaba aceleradamente en Comercio, Ciencia y Desarrollo Humano, para facilitar todo ello se crearon máquinas como el Aritmógrafo , precursor de las modernas calculadoras, que facilitaban el manejo de las matemáticas ..Acá un aritmógrafo Alemán Addiator, que realiza las 4 operaciones, acompañando a un reloj de bolsillo Longines calibre 17.27, mecanismo robusto y fiable, aún en funcionamiento.
Década de 1930.
El hombre sale a redescubrir todos los lugares aún inexplorados , para ello se provee de todo tipo de instrumentos , como este nivel de ingeniero, le acompaña en su muñeca una reciente innovación , el reloj de pulsera, como este Cyma con anillas incorporadas a la caja.
Década de 1940
En esta década todos los instrumentos alcanzaron logros increíbles, para ello se usaron materiales nobles como el bronce , acá un Caliper Stanley de 3”, que permite mediciones muy fiables en pulgadas americanas , acompañado de un reloj de bolsillo Ferroviario, Waltham Vanguard size 16 de 1943, de gran precisión y confianza ( +/- 4 seg/día ), que permitía el movimiento seguro de una red ferroviaria, el reloj se integraba plenamente a la vida y al trabajo cotidiano.
Década de 1950
El desarrollo humano alcanzaba grandes logros , el comercio mundial se incrementó y alcanzaba nuevas fronteras, lo cuál demandaba mejores medios e instrumentos, como esta calculadora Alemana de molinete de cuatro operaciones , marca Schubert, que puso los cálculos esenciales al alcance de todos de manera sencilla y fiable, la mayoría de los relojes eran aún de carga manual , como este Movado de 1953.
Década de 1960.
El desarrollo técnico y aeronáutico y , la sociedad del conocimiento requieren más herramientas al alcance de la mano, como esta Regla de Cálculo Faber Castell de 1967 , acompañada por dos íconos relojeros del desarrollo aeronáutico de aquella década , el Universal Polerouter y el Rolex GMT, los automáticos comenzaban a imponerse en todos los ámbitos.
Década de 1970.
Son años de Bonanza y consolidación post Guerra Fría , la industria y el comercio empiezan a copar el mundo , los cálculos requieren precisión y rapidez , lo que es proveído por las modernas y programables calculadoras manuales, como esta HP científica, en tanto el reloj ha ganado en elegancia y glamour , como este Zenith de 1975 .
Década de 1980.
La industria relojera está en Crisis , Oriente parece invadirlo todo con las nuevas tecnologías digitales , que también invaden otras áreas del desarrollo humano , un instrumento de uso doméstico como una Balanza de Cocina posee ya un lector digital y aún mantiene las lecturas en sistema Inglés ( onzas ) y de gramos , le acompaña un reloj digital clásico de la Década , el Casio F-91W.
De los 150 gramos iniciales, el reloj se ha reducido más de 7 veces, hasta llegar a sólo 20 gramos.
Década de 1990.
Las comunicaciones rápidas y expeditas son ya parte esencial del Comercio y de todo el desarrollo humano, lo cuál podemos apreciar en este Teléfono portátil Nokia de fines de aquella década, acompañado de un Seiko Cronograph Análogo , las manecillas volvían por sus fueros .
La incorporación de un registro digital de la hora en el telefóno portátil iniciaba la disminución masiva del reloj en la muñeca humana, especialmente en la femenina…
Primera Década del Nuevo Milenio.
El desarrollo tecnólogico alcanza nuevas cimas , el Sistema de Posicionamiento Global es puesto al alcance de todos, en nuestras manos está graficada toda nuestra Tierra y nos permite viajar sin contratiempos a través de cualquier ruta terrestre o aérea . Acá un GPS Garmin , que muestra con un precisión de +/- 4 metros el lugar de la Tierra dónde me encuentro , le acompaña un reloj de piloto “Cuatro Vientos”, que establece un vínculo entre ese pasado glorioso y el ancho mundo de las nuevas tecnologías , como el GPS , que posee un fino sistema relojeril que mide el “Tiempo que tarda la señal de radio emitida, en ir y volver hacia los 4 satélites” de mejor ubicación para ese punto y que permite realizar la “emulación” de un reloj atómico en su interior, la medición de los tiempos hacia cada uno de los 4 satélites permite obtener sus respectivas distancias a ellos y, por ende el procesador interno realiza una triangulación determinando el punto dónde se encuentra el observador , vale decir es el reloj del GPS el que permite la localización exacta del punto.
Resumen y Conclusión
A pesar de todos estos desarrollos, la historia muestra que el reloj se ha mantenido y prevalecido como fiel compañero, cómplice mudo de todas nuestras acciones, en lo cotidiano y también en lo excepcional, siendo a la vez un instrumento, una joya y, un símbolo de status , de elegancia y personalidad.
Entonces al parecer habrá manecillas de horas, minutos y segundos marchando sobre esferas circulares por mucho tiempo más … El reloj es un sobreviviente porque vivimos inmersos en el río del tiempo y no podemos sustraernos a ello.. Llegará quizá el día en que el único objeto-instrumento-identificación-adorno – etc., que acompañe la existencia humana se encuentre en nuestra muñeca….
A ver que opinaís sobre todo esto.
Mis saludos a todos.
